Promesa

Me hiciste una promesa,
y veo que no la cumpliste,
no te puse condiciones,
ni en mis días más tristes.
Siempre fue,
buena intención,
de hacerla realidad,
en tu posición,
y con alas de libertad.
No me olvides nunca mi niño,
que sueño con tus ojos,
los recuerdo con cariño,
en imágenes y me sonrojo.
Promesa de que siempre querrás saber de mi,
para poder seguir viviendo,
y ser testigo fiel,de que te vi.
Me prometiste que volverías,
y tu decir misterioso,
tan profunda la herida mía,
que me haces sentir.
La soledad me embarga,
lo veo todo negro,
aunque el brille el sol en Canarias,
y no deje de mirar al cielo.
Siento una profunda tristeza,
y los días pasan...
que mis ojos se llenan,
de profundas lágrimas.
De horas tristes,
y con ganas de llorar,
no sabiendo lo que hice,
de estos tiempos infelices.
De tu promesa, nada tengo que decir,
pero visto y no visto,
es mi valor, a la hora de escribir,
esperando a ver si lo consigo.