Escribirte yo podría,
rozando mi corazón,
agua clara, alma mía,
ay! que grande mi dolor.
El invierno llega a su fin,
lluvioso y amargo caía,
la rosa violeta quiere vivir,
llora, y se muere, en su lejanía.
Algunos tiempos pasados,
quedaron muy dentro de mí,
de diarios escritos inacabados,
y la lluvia que me hace sentir.
Descansa el invierno,
y duerme la noche fría,
nada se hace eterno,
embeleso de tus caricias.
Además del semblante,
la luna me necesita,
cielo gris, luz amable,
obsequio de su sonrisa.
Y la nieve blanca cae,
en copos sobre el cristal,
siento la noche amante,
y el ruiseñor empieza a cantar.
rozando mi corazón,
agua clara, alma mía,
ay! que grande mi dolor.
El invierno llega a su fin,
lluvioso y amargo caía,
la rosa violeta quiere vivir,
llora, y se muere, en su lejanía.
Algunos tiempos pasados,
quedaron muy dentro de mí,
de diarios escritos inacabados,
y la lluvia que me hace sentir.
Descansa el invierno,
y duerme la noche fría,
nada se hace eterno,
embeleso de tus caricias.
Además del semblante,
la luna me necesita,
cielo gris, luz amable,
obsequio de su sonrisa.
Y la nieve blanca cae,
en copos sobre el cristal,
siento la noche amante,
y el ruiseñor empieza a cantar.
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