A nte la espera más larga, el tiempo nos va concediendo el reino de la vida.
C ancionero de amor, para el espejo de tu honor y, que no deje de crecer.
R osas blancas corté de mi jardín, para dedicarte todas estas sensibles palabras.
O ro en paño es esta vida, a pesar de que se sufre y se ama en todo el presente.
S entada en el muro de la espera, con la flor en tus manos para dársela a ella.
T rataré de mimarte y sé que vivirás con una sonrisa en el silencio discreto y mutuo.
I ncitas al más absoluto poema y tus ojos llenos de amor con momentos desvelados.
C uando quieras que te escriba, tiéndeme tu mano y escucharé todo lo que sientes.
O jos vidriosos al leer estos versos llenos de cariño y, sabes que nadie lo dudará.
P oeta, amiga y compañera de versos, de muchos momentos y de sentimientos.
A la mejor parte le diste todo tu corazón y, besando sus mejillas poco a poco se oyó…
R osas blancas con corazón, duerme y sueña…que me voy a poner mejor.
A mante de la poesía, cuya hazaña es envolverte en versos muy tiernos.
E res mucho más amable de lo que llegué a imaginar en aquellos momentos.
L a canción se acaba, pero esta dedicatoria la escribí con mucho cariño para ti.
I ntenta que el paso duro y fuerte de esta vida te alcancé con fuerza y esperanza.
S é que podrás escribir tus poemas más sentidos de amor, con tu delicada pluma.
A las estrellas como al cielo de tus ojos, reinará por donde vayas dejando tus pasos.
L entamente se acaba el día, pero el destino guardará muy hondo el llanto de tus ojos.
L o que lees aquí, no es para que llores, es mi cariño y entiendo bien que te emociones.
E l momento me acompaña para escribirte en tus manos, y se quedó guardado en mi corazón.